Probablemente, en Internet no existe un sparring más recurrente y aceptado que los algoritmos. Crípticos, siempre en continua transformación e ininteligibles para el común de los mortales, han servido durante años para explicar lo inexplicable en el mundo del marketing digital: desde una disminución repentina en el número de visitantes de una web hasta un descalabro en los resultados de búsqueda de Google que bien podría ser a causa del SEO. Sin embargo, un artículo reciente sobre Facebook publicado en The Guardian pone en tela de juicio la supuesta asepsia de estas complejas operaciones matemáticas.

¿Decide Facebook lo que vemos y lo que no vemos?

Durante sus primeros años, Facebook fue visto como una especie de patio de vecinos amplificado, en el que los usuarios podían compartir imágenes e informaciones personales sin restricciones, al margen de las habituales (contenido violento, sexual, etc.). Una situación acabó cuando las empresas empezaron al gigante tecnológico en su estrategia de marketing, lo que motivó una primera perversión de la idea original: desde entonces, el número de impresiones de una publicación empezó a estar estrechamente ligado al presupuesto que la empresa destinara a patrocinarla.

Al margen de esto, la red de Mark Zuckerberg presumía de una idílica imagen de imparcialidad que se ha ido resquebrajando poco a poco, sobre todo en los últimos días. Si hasta la fecha Facebook afirmaba que los contenidos que aparecían en el muro de los usuarios eran seleccionados automáticamente por un algoritmo.

Sin embargo, un reportaje publicado el pasado 12 de mayo por el diario británico The Guardian ha dinamitado la aparente neutralidad de Facebook. El controvertido artículo hablaba de la existencia de una guía interna que siguen los empleados de Facebook para decidir qué noticias deben destacarse el muro de los usuarios.

Esta bomba incendiaria abrió la caja de Pandora: con esta bomba, quedaba claro que los de Mountain View habían engañado a sus usuarios a la hora de atribuir la configuración de los timelines exclusivamente al algoritmo. Si damos pábulo al rotativo londinense, Facebook cuenta con trabajadores que se ocupan de corregirlo. El objetivo no sería otro que dar más peso a aquellas noticias que la plataforma quiere que se vean y esconder el resto.

La red social entra en campaña

Durante se produjo pocos días después de que organizaciones cercanas al presidente al candidato conservador a la Casa Blanca, Donald Trump, y el Partido Republicano hubieran denunciado a Facebook por censurar contenidos.

De todos modos, The Guardian no ha sido el único medio de comunicación que ha hecho saltar las alarmas; de hecho, un antiguo empleado de Facebook ha explicado al portal de tecnología Gizmodo que los editores del muro recibían instrucciones para incrementar la presencia de determinados tipos de noticias, pero también para censurar otras.

Así, ciertas informaciones que suscitaban poco interés entre los usuarios eran promocionadas artificialmente (fundamentalmente, relacionadas con cuestiones políticas). Estos contenidos convivían con otros que eran retiradas por criterios ajenos al interés de los internautas.

La polémica suscitada por esta afirmación ha llegado incluso al congreso de Estados Unidos, donde se ha abierto una investigación para aclarar la supuesta manipulación a la que Facebook somete a sus contenidos informativos. Esta decisión coincide con la reunión entre miembros de la red social y delegados del Partido Republicano, en una convención que ha sido patrocinada por la empresa de Palo Alto, como ellos mismos anunciaron. ¿Casualidad?

Las malas prácticas de Facebook han caído como un jarro de agua fría en Estados Unidos, debido al gran número de estadounidenses que lo utilizan. De hecho, este país concentra alrededor de 155 millones de usuarios, el 10% del total de perfiles de esta red social. Además, 2 de cada 3 adultos lo utilizan al menos una vez al día, lo que lo convierte en la plataforma 2.0 más habitual, seguida de Pinterest.

Además, este frente abierto se suma a la preocupación de Facebook por el desplome de la información personal que se comparte en Facebook.

¿Cómo lograr más visibilidad en Facebook?

Aunque todo apunta a que las estrategias de contenidos desarrolladas por los usuarios tienen menos peso del esperado a la hora de lograr una buena visibilidad, eso no quiere decir que no haya que adoptar una serie de acciones para ganar notoriedad en las redes sociales.

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